Caída de Presión
¿Qué es una prueba de fugas por caída de presión?
La caída de presión es uno de los métodos más utilizados para detectar fugas en la fabricación y es ideal para componentes sellados con puerto de acceso. En esta prueba, se conecta un producto a un comprobador de fugas y se llena de aire. Una vez presurizado, se cierra la válvula de la fuente de aire y se deja que la presión se estabilice. Durante la prueba, cualquier disminución de la presión de aire con el tiempo indica una fuga. Si la pieza no presenta fugas ni deterioro más allá de su valor de rechazo predeterminado, se considera una pieza en buen estado. La sensibilidad de esta prueba depende del tamaño del producto y del intervalo de tiempo. Los objetos más grandes requieren un tiempo de ciclo más largo para alcanzar una sensibilidad suficiente para una prueba de calidad. Los objetos más pequeños con volúmenes internos reducidos requerirán un tiempo de ciclo muy bajo, lo que permite un alto rendimiento de producción.
Ejemplos de aplicaciones:
- Catéteres
- Equipo intravenoso
- Tubos
- Inyección sin aguja
- Bolsa
- Dispositivo implantable
- Equipo de infusión
- Dispositivo dosificador
- Sensores/indicadores
En general, los comprobadores de presión diferencial son soluciones ideales para componentes que manejan grandes volúmenes con bajas tasas de fuga.